Cada reto que te planteas requiere de un plan de entrenamiento estructurado y personalizado (sea un evento de verano, una temporada de marchas/carreras o simplemente mejorar tu condición física para estar entre los mejores de la grupeta). No es lo mismo plantear una temporada para un evento, a que simplemente quieres tener una condición física óptima todo el año.
Es muy importante una mentalidad motivada para alcanzar tus objetivos, al igual que una planificación de tus entrenamientos con un plan estructurado tanto para el entrenamiento como en la alimentación. Todo ello va a evitar lesiones, pérdida de motivación y te va a proporcionar salud, bienestar y seguridad en tí mismo.
Un plan de entrenamiento estructurado y personalizado te va a proporcionar ese plus de motivación que necesitas para afrontar tu reto pero se debe adecuar a tus objetivos. La función del preparador o asesor deportivo es escuchar, conocer al deportista, saber sus inquietudes y así elaborar en conjunto, un plan de entrenamiento en base a las horas y días libres para combinar el entrenamiento con la jornada laboral, familiar, ocio, etc…
Un buen preparador aconseja, instruye, ayuda y te acompaña durante la temporada a que se cumplan tus metas. Es importante tener un apoyo moral durante los momentos duros de la temporada cuando la motivación decae o simplemente, cuando crees que tu rendimiento no mejora.
Siempre he pensado que la parte de un preparador, además de la función de asesor deportivo y consejero, es la de profesor. Aprendes a entrenar, a una correcta alimentación y a utilizar las tecnologías que miden tus resultados. Y cuando has aprendido todo esto, tu mismo te puedes planificar la temporada o tu reto personal. Has invertido en ti y en tu salud
Entrena eficazmente en bicicleta 